YOGA TAICHI 91
Alianza armoniosa de Yoga, Taichichuan, Qigong y Meditación
Beneficios del YOGA
Estimula y despierta el cuerpo en todos sus aspectos y funciones
Restablece la flexibilidad natural
Mejora el sistema digestivo
Promueve la relajación
Aumenta el dinamismo
Genera bienestar físico y mental
Mejora la circulación de la energía
Restaura la simetría y mejora el equilibrio
Libera las articulaciones y corrige alineaciones y desequilibrios
Lucha contra la fatiga, el insomnio y el dolor de espalda
Alarga las cadenas musculares
Estimula la circulación sanguínea
Corrige las malas posturas
Mejora el flujo nervioso, los reflejos y la concentración
Reduce el estrés, la ansiedad y la tensión nerviosa
Mejora las funciones inmunitarias y la capacidad de defensa del organismo.
Promueve un estado mental claro y centrado, desarrolla la fuerza interior y nuestra capacidad para crear las causas y condiciones de nuestro bienestar.
Esta práctica ancestral hará un milagro a corto, medio y largo plazo en su vitalidad y flexibilidad. Cada parte del cuerpo es solicitada en profundidad en un beneficioso estiramiento que lubrica y suaviza todas las articulaciones.
Los 5 principios del yoga según Swami Vishnudevananda
1. Ejercicios adecuados (Asanas)
Las asanas (posturas) trabajan en todas las partes del cuerpo, lubricando todo el sistema corporal al estimular la circulación y mejorar la flexibilidad.
"Asana" significa "postura sostenida realizada con conciencia que proporciona una sensación de bienestar y mejora la capacidad de concentración y meditación".
Las asanas de yoga trabajan principalmente en la salud de la columna vertebral. La columna vertebral contiene el sistema nervioso central, el sistema de comunicación del cuerpo, del que depende la salud de todo el organismo.
La flexibilidad y la fuerza de la columna vertebral se mantienen gracias al ejercicio adecuado, la circulación mejora, los nervios tienen asegurado un mejor suministro de nutrientes y oxígeno, y el cuerpo se mantiene joven durante mucho tiempo. Además, las asanas activan puntos de presión que, al ser estimulados, aumentan el flujo de prana (fuerza vital o energía vital) en el cuerpo.
Las asanas también masajean los órganos internos, permitiéndoles funcionar mejor. Practicadas siempre junto con la respiración profunda, la relajación y la concentración, las asanas ayudan a desarrollar la concentración mental. La mente inquieta se aleja de las distracciones externas, se vuelve hacia el interior y encuentra la paz.
2. Respiración correcta (Pranayama)
El pranayama, o respiración correcta, conecta la batería del cuerpo, el plexo solar, donde se pueden almacenar y recuperar enormes reservas de energía. Esta energía puede liberarse mediante los ejercicios de respiración del pranayama. Controlar conscientemente nuestra respiración nos permite almacenar y acceder a una mayor cantidad de energía vital o prana.
La mayoría de las personas sólo utilizan una fracción de su capacidad pulmonar para respirar. Respiran superficialmente, y la falta de oxígeno provoca tensión en la parte superior de la espalda y el cuello. La respiración abdominal profunda del yoga puede liberar viejas toxinas y tensiones e incluso la depresión. Una persona con abundante prana irradia fuerza y vitalidad y trabaja con eficacia, calma y concentración.
El pranayama (ejercicios de respiración) aumenta el prana y ayuda a controlarlo. Existe una sutil conexión entre el prana y la mente. Al controlar el prana, controlamos la mente. Todas las enfermedades del cuerpo pueden ser destruidas de raíz controlando el prana, que es el secreto de la curación. La acupuntura, el shiatsu y la curación espiritual son ejemplos de control consciente o inconsciente del prana.
3. Relajación correcta (Savasana)
La relajación adecuada es un elemento vital para mantener el cuerpo y la mente sanos. Cuando se practica correctamente, libera inmensos recursos de energía. Una relajación adecuada refresca el sistema, como el refrigerante de un coche. Cuando el cuerpo está relajado, la naturaleza puede recargarlo más eficazmente. Cuando el cuerpo y la mente están constantemente sobrecargados, tenemos la sensación de "demasiado".
El estrés y los retos de la vida moderna dificultan la relajación. Desperdiciamos una enorme cantidad de energía en un esfuerzo físico y mental innecesario. Durante el día, nuestro cuerpo produce todas las sustancias y energías necesarias para el día siguiente, pero a menudo se disipan en pocos minutos por ataques de emociones negativas como la ira, la pena, los celos, etc.
Durante la relajación profunda, sólo se utiliza una pequeña cantidad de prana para mantener importantes actividades metabólicas. Unos minutos de relajación profunda pueden recargarnos más eficazmente que horas de sueño agitado.
4. Dieta correcta (vegetariana)
La dieta yóguica, esencialmente lacto-vegetariana, consiste en platos naturales preparados con verduras frescas y orgánicas. La dieta yóguica nutre tanto el cuerpo como la mente y es la más adecuada para la práctica del yoga y la meditación.
Una dieta yóguica simple es una dieta equilibrada, natural y sin productos químicos que garantiza la mejor fuente de nutrientes. La relación yóguica con la comida es: comer para vivir, no vivir para comer, comer los productos que tienen el efecto más positivo para el cuerpo y el menos negativo para el medio ambiente y otras criaturas.
5. Pensamiento positivo y meditación (Vedanta y Dhyana)
El pensamiento positivo y la meditación son claves importantes para lograr la paz mental.
La meditación es el arte de ralentizar y concentrar la mente.
La práctica regular ayuda a conseguir el bienestar mental, físico y espiritual. Para meditar bien, primero debemos calmar la mente con técnicas de concentración y pensamiento positivo.
Una mente llena de emociones negativas y pensamientos dispersos no puede calmarse. Mediante las técnicas de concentración, las oleadas de pensamientos negativos se sustituyen por imágenes positivas y las autosugestiones llevan a la mente a un estado de calma y tranquilidad. macos/deepLFree.translatedWithDeepL.text